La incontinencia, como síntoma de la fase de llenado, se define como la enfermedad, o condición médica, caracterizada por cualquier pérdida involuntaria de orina que supone un problema higiénico o social. No es una enfermedad que ponga en peligro la vida del paciente, pero deteriora significativamente la calidad de vida de quien la padece, ya que reduce su autoestima y merma su autonomía. Se diferencian varios tipos de IU:
- Incontinencia urinaria de Esfuerzo
- Incontinencia urinaria de Urgencia
- Incontinencia urinaria Mixta
La incontinencia urinaria de Esfuerzo es la pérdida de orina involuntaria por la uretra, que está sincronizada con la realización de un esfuerzo, como puede ser el toser, caminar, correr, agacharse… La causa es la disminución de la presión uretral y puede estar producida por dos causas:
- Uretra Hipermóvil: los elementos de sostén de la uretra están dañados o debilitados.
- “Deficiencia esfinteriana intrínseca”, donde existe un cierre de la uretra ineficiente.
La IUE como síntoma de una disfunción del suelo pélvico puede asociarse a otras patologías, como el prolapso genital, que presenta un tercio de las pacientes (cistocele o prolapso vaginal anterior; rectocele o prolapso vaginal posterior; prolapso uterino y enterocele), o a la incontinencia fecal.
Tratamiento
El tratamiento de esta IUE consiste en tratar de aumentar la resistencia de la uretra para que la presión intravesical no supere a la uretral durante los esfuerzos. Como alternativa, podemos optar por el tratamiento de la musculatura del suelo pélvico con un fisioterapeuta especializado en ello.
La rehabilitación muscular del suelo pélvico es la contracción activa de los músculos del suelo pélvico realizada de forma regular, que puede realizarse con o sin la ayuda de sistemas de biofeedback. Hay que tener en cuenta las características de cada paciente, y hace un tratamiento personalizado a cada una.