La fascitis plantar es la inflamación del tejido grueso en la planta o parte inferior del pie. Este tejido se denomina fascia plantar y es el que conecta el calcáneo (hueso del talón) a los dedos y crea el arco del pie.
La fascitis plantar ocurre cuando la banda gruesa de tejido en la planta del pie se estira o se sobrecarga demasiado. Esto puede ser doloroso y hacer más difícil el hecho de caminar.
Se es más propenso a presentar fascitis plantar si se tiene:
– Problemas en la morfología del pie (pie valgo/plano, pie cavo).
– Aumento brusco de la actividad física sin una buena preparación progresiva.
– Aumento repentino de peso u obesidad.
– Musculatura posterior (gemelos, sóleo y tendón de Aquiles) excesivamente tensos.
– Zapatos demasiado blandos.
La queja más común es el dolor y la rigidez en la parte inferior del talón. La planta del pie también puede doler o dar sensación de quemazón.
El dolor generalmente es peor:
– En la mañana cuando se dan los primeros pasos del día.
– Después de pararse o sentarse por un rato.
– Al subir escaleras.
– Después de actividad intensa.
Dentro de los posibles tratamientos destacaremos:
– Aplicación de hielo en la zona 2-3 veces al día.
– Pauta de estiramientos para la planta y la musculatura posterior.
– Fisioterapia para bajar la inflamación y el dolor.
– Estudio biomecánico de la marcha con el objetivo de detectar un problema en la pisada que nos esté dando la patología y poder corregirlo mediante unas plantillas personalizadas.
Aitor Pérez
Podólogo col. 2672