El dolor es una sensación desagradable, está diseñada para protegernos y facilitar la curación de las lesiones.
En ocasiones el dolor puede comportarse de forma extraña. Ya que esta modulado por el cerebro. De esta forma, aunque exista algún problema en tu tejido probablemente no notarás dolor a menos que el cerebro piense que estas en peligro. Y de igual manera ocurre que aunque no exista ningún problema en los tejidos sentirás dolor si el cerebro piensa que estas en peligro.
Por ello para entender el dolor, va a ser clave descubrir porque el cerebro ha llegado a estas conclusiones.
Es importarte saber que la intensidad del dolor que experimentas no está relacionada directamente con la cantidad de daño sufrida en el tejido.
Es el cerebro el que decide si algo duele o no, para ello se vale de las experiencias anteriores y de las situaciones en las que nos encontramos.
Todo ello ha supuesto un cambio de paradigma en el tratamiento y entendimiento del dolor, abriendo una ventana al tratamiento de dolores complejos que tratados de forma adecuada pueden mejorar y/o solucionarse.
Javier Lledó
Fisioterapeuta col. 385