Nuestro Sistema Nervioso está formado por dos partes principales, el Sistema Nervioso Central (cerebro, cerebelo, bulbo raquídeo y médula espinal) y el Sistema Nervioso Periférico (formado por los nervios que están fuera del sistema nervioso central).
El cerebro, es como el ordenador del cuerpo, recibe la información que llega tanto del entorno que nos rodea, como de nuestro medio interno, la procesa, analiza y codifica, para poder emitir una respuesta en consecuencia. Cualquier circunstancia que afecte al funcionamiento del cerebro, provoca alteraciones en las respuestas cerebrales y una sintomatología diferente, dependiendo bien de la zona o parte del cerebro que se haya afectado, de la causa, o de la intensidad. Además del cerebro, en el Sistema Nervioso Central encontramos otras estructuras importantes como la médula espinal, el cerebelo, los nervios, estos repartidos por todo el cuerpo, siendo los encargados de recibir la información desde la piel, las articulaciones, los huesos, los órganos internos, etc., y a su vez estos hacen llegar las órdenes a las estructuras efectoras.
Otra parte importante del Sistema Nervioso es el sistema nervioso autónomo o involuntario, regula y coordina las funciones que son involuntarias, y automáticas.
Las alteraciones que podemos encontrarnos, son enfermedades congénitas, aquellas que se manifiestan desde el nacimiento (por alteración en el desarrollo durante el embarazo, en el parto o como consecuencia de algo hereditario), o alteraciones y enfermedades adquiridas como infecciones (meningitis, encefalitis,…), traumatismos (craneoencefálicos, medulares, …), tumores, accidentes cerebrovasculares, enfermedades degenerativas (enfermedad de Alzheimer, Parkinson, Esclerosis Múltiple, …), hidrocefalia, anoxias cerebrales, etc.
El tratamiento de este tipo de patologías incluye diferentes especialidades, disciplinas y profesionales, dependiendo de la fase evolutiva del proceso (aguda, subaguda, crónica, paliativa), que abarque los distintos ámbitos y áreas que pueden verse afectadas, neurología, neurocirugía, rehabilitación, fisioterapia, psicología, neuropsicología, logopedia, incluso trabajo social.
Después de la fase aguda de la enfermedad, es importante el trabajo interdisciplinar que va a marcar los objetivos de la rehabilitación en cada caso, mejorar la funcionalidad, conseguir la adaptación ante los cambios, potenciar la independencia, reinserción laboral o escolar, proporcionar ayuda y apoyo a los familiares y / o cuidadores de la persona afectada, etc. Todo esto se consigue trabajando de forma cohesionada tato las alteraciones a nivel físico (dolores, deformidades músculo – esqueléticas, etc.), como a nivel cognitivo (memoria, lenguaje, atención, etc.), psicológico (depresiones, trastorno orgánico de la personalidad, etc.).
Nuestro equipo, formado por los profesionales de Fisioterapia Especializada Fco Lledó, y Neuroestimul cuenta con la formación y la infraestructura necesarias para poder ofrecer una rehabilitación de calidad y que se adapte a las necesidades de cada persona. Nuestro trabajo está avalado por muchos años de experiencia en este tipo de patologías. Los profesionales están comprometidos con una formación continua que ofrece las mejores técnicas de rehabilitación en las diferentes áreas del Servicio de Neurorehabilitación.
Equipo Fisioterapia Lledó y Trat. Neurológico Neuroestimul